lunes, 18 de julio de 2011

La bronca plasmada en una nota




La palabra "respeto" ya no corre en el diccionario de la selección nacional, porque las camisetas denominadas fuertes dejaron de surgir efecto y no son más que los equipos humildes. Eso ya es parte del pasado. Hoy por hoy, Bolivia de visitante (y ni hablar de local) le sale a jugar de igual a igual a la Argentina y quedó demostrado en el debut de la copa América y en el partido previo disputado en La Paz. Cómo olvidarlo.




Según gran parte de los argentinos aficionados al fútbol , creen que el seleccionado albiceleste debe parecerse al Barcelona, que Messi no es el Messi que todos conocemos, que los laterales son simplemente laterales y no volantes y/o extremos, que el DT debe ser un hombre de experiencia y demás inquietudes, ¿cuántas interrogantes puede tener un equipo y sin embargo triunfar?




El triple cinco que propone Batista delineando un "rombo" en la mitad de la cancha para "facilitarle" la llegada de la pelota a Lionel Messi, es simplemente un capricho del técnico ya que no dio ningún resultado. El diez debió retroceder hasta la mitad de la cancha para iniciar desde allí la carrera hacia el área rival. Algo insólito.




Otra vicisitud es la defensa que aún no se termina de afianzar , por un lado por la interminable variación de sus jugadores y por el otro, porque la Argentina carece de laterales que gesten un juego horizontal como en su caso posee Brasil: Dani Alves, Maicon, André Santos, Adriano, etc.




Continuando con los déficits del equipo nacional, que por sí no son pocos, se puede decir que el tiro de media o larga distancia dejó de existir. La pelota parada tampoco es realizada con un buen trabajo previo , sino al voleo. Y así sale como sale.




La infinidad de errores -algunos tácticos, otros, en su minoría técnicos- conllevan a la selección Argentina a defraudar a su público y no lograr convencerlo de que se identifique con el equipo que además hace de local.




Una de las soluciones urgentes podría ser que cada uno de los integrantes del elenco juegue, al menos, con las medias de su equipo como lo hacen los jugadores de rugby del Barbarians.




Así, tal vez recuerden en dónde juegan a la hora de entrar a la cancha con la camiseta nacional y a su vez, se acuerden de qué se trataba jugar al fútbol.




martes, 14 de junio de 2011

La palabra "Campeón" le está empezando a quedar chica






Cuanto más grande, más viejo, cuanto más viejo, más ganador. Así es la realidad de Omar Andrés Narváez, quien anoche en el Luna Park retuvo por tercera vez el título mundial supermosca de la Organización Mundial de Boxeo frente al Colombiano William Urina que de las últimas 19 peleas, ganó 18 y 14 por knock out. Un rival de alta exigencia para el oriundo de Trelew, sin embargo, éste, demostró una vez más por qué es "el mejor de todos" como bien declaró en la semana previa al combate.



La victoria del argentino se produjo por fallo unánime ya que las tres tarjetas de los jueces lo dieron como el ganador. El resultado fue 117 a 110. Luego de la decisión del jurado se desató el delirio y el festejo de la gente en el estadio de la calle Bochard, al grito de "dale campeón".



El "Huracán" insiste con unificar los títulos e ir a pelear al exterior ya que desde el 2008 no sale del país. Sin embargo, luego de este triunfo cree que las chances por cumplir ese deseo aumentarán. No obstante, como sostuvo Narváez: "Todo eso queda en manos de Osvaldo Rivero, mi representante".



De aquí en adelante es cuestión de esperar qué sucederá con el múltiple campeón de Trelew y su futuro que por cierto no será demasiado extenso teniendo en cuenta la edad del chubutense quien cumplirá los 36 años el 7 de octubre próximo.



Pero para ello falta un tramo largo. Y hoy continúa dándole alegrías al pueblo argentino y éste debe encargarse solamente de disfrutar, como sucedió ayer en el Luna Park. Que las satisfacciones perduren, mientras Narváez siga peleando.

miércoles, 6 de abril de 2011

A cambiar el "chip" y vendrán tiempos mejores


Eras el sueño que rondaba en mi cabeza, el anhelo de volverte a conquistar y verte posar otra vez en mi enriquecida vitrina, pero la mala racha y la peor fortuna, entre otras cosas, fueron determinantes e hicieron que ese imperioso deseo de volverte a tener se esfumara casi de inmediato. Para peor, sin ni siquiera con una cuota de anestesia mediante; fue un golpe directo a lo más profundo del alma. O al menos así lo siente el hincha de Independiente. No es cuestión de repartir culpas, de nada sirve, sino todo lo contrario, hay que remontar este bajón anímico para encarar lo que se aproxima que no es poco: el viernes hay una final frente a Godoy Cruz y el siguiente sábado es el clásico de Avellaneda. Dos buenas excusas para tornar esta malaria en positivismo.

Libertadores, el antojo de querer conquistarte por octava vez se postergó hasta nuevo aviso. Hoy la realidad es otra y hay que cambiar el "chip" y sumar en el torneo local para evitar disgustos a futuro. Independiente tiene las herramientas para hacerlo y deberá demostrarlo de cara a lo que se viene. La meta de los 30 puntos no es una utopía y se puede lograr.

Si bien, en lo anímico los jugadores no están de la mejor manera, un triunfo en el partido del viernes frente al "Tomba" podría calmar un poco las aguas, sin embargo la mente del hincha traiciona un poco y ya está pensando en el sábado 10 frente a Racing. Pero no hay que saltear pasos.

Tiempo de Copas ya habrá nuevamente, el 3 de agosto espera la Suruga Bank, en el mismo mes la Sudamericana (como defensor del título) y en septiembre la Recopa. Habrá que prepararse bien para dichos torneos y "resurgir nuevamente de las cenizas" para volver a desplegar esa mística inigualable que le dio la Copa Sudamericana a estos mismos jugadores y volver a replegar ese mote de "Rey de Copas" que tan bien le calza a Independiente. Que así sea.

martes, 22 de febrero de 2011

Noemí, siempre en lo más alto


La ex gran atleta de la ciudad de Avellaneda y del Club Atlético Independiente, falleció a los 85 año a causa de una enfermedad ósea.


Noemí Simonetto, actual responsable de un inmenso dolor en el atletismo nacional tras su partida, se la recuerda como una gran leyenda, ya que fue la única atleta que logró conseguir una medalla en unos Juegos Olímpicos, más precisamente, en los de Londres 48, cuando en aquella oportunidad obtuvo el segundo lugar en salto en largo, tras marcar 5,60 metros y quedar a tan sólo 9 centímentros de la húngara Olga Gyarmati, quien cosechó el oro en el último intento con un salto de 5,69.

La "Tanita", como se la recordaba afectuosamente, estaba internada en terapia intensiva en el Centro Gallego de Buenos Aires, desde hace una semana luchando por su vida. Lucha que tristemente perdió.

Sin embargo, cuando se menciona el apellido "Simonetto", los amantes del atletismo no olvidan los logros de la nacida en Avellaneda, quien fue varias veces campeona sudamericana: cuatro en postas 4x100, tres en salto en largo, dos en 80 metros y una vez en 100 metros llanos. Mucho para recordar, y a su vez, demasiado para destacar e imitar.

Sin dudas, un emblema del atletismo nacional que finalmente dio su último "gran salto" al cielo para repetir aquellos años de competencia y mirar a todos desde lo más lejano, como bien nos tenía acostumbrados en los campeonatos.